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“Principios Metafísicos”, de Rubén Cedeño, es el cuarto texto de estudio, según los “Programas de Estudio de la Metafísica”; lo anteceden los libros: “Pilares de la Metafísica”, “Siete Rayos” y “Metafísica Avanzada”, que es conveniente conocer y poner en práctica para comprenderlo; de todos modos, es posible entenderlo ya que su contenido es básicamente práctico.
Esta obra trata temas de instrucción interna y ética viviente indispensables, y finaliza con sabios consejos para superar las pruebas de la “Vivencia Interna” y las dificultades de la vida. Tanto “Metafísica Avanzada” como “Principios Metafísicos” pertenecen a una serie de libros llamados “Cartas Metafísicas”, que ilustran, al detalle, los planteamientos hechos en textos como “Pilares de la Metafísica” y “Siete Rayos”.
Extracto del Libro “Principios Metafísicos”, de Rubén Cedeño.
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“Dios Inmanente” y “Dios Trascendente” son dos formas de abordar el conocimiento y la realización de Dios, para su estudio y comprensión.
“DIOS INMANENTE” es Dios dentro de cada humano, en el “microcosmos”, como “El Ser Interno” o la “Chispa Chispa”.
Dios, con toda Su inmensidad, infinitud, bondad y deseos de producirte “Bienestar”, está dentro de ti, como tu “Ser Interno”. Tú puedes pensar y meditar: “Yo Soy la Presencia de Dios dentro de mí”. Eso lo puedes decretar cada vez que te acuerdes, para ir desenvolviendo la conciencia de que Dios vive en ti.
“DIOS TRASCENDENTE” es Dios en el Macrocosmos, como en el “Ser Supremo”, el “Gran, Gran, Gran Sol Espiritual Central”.
“Dios Inmanente” y “Dios Trascendente” son “UNO” e indivisibles, porque “Dios Inmanente” está contenido dentro de “Dios Trascendente”, y al contrario también. Ante cualquier situación conflictiva, reconoce cuál es el Aspecto de Dios opuesto y decrétalo.
Si hay maldad, Dios es Bondad.
Si hay amenazas, Dios es Protección.
Si hay temor, Dios es Fe.
Si hay odio, Dios es Amor.
Si hay discordancia, Dios es Armonía.
Si hay fealdad, Dios es Belleza.
Si hay engaño, Dios es Verdad.
Si hay enfermedad, Dios es Salud.
Si hay carencia, Dios es Provisión y Abundancia.
Si hay confrontación, Dios es Paz.
Si hay desorden, Dios es Orden Ceremonial.
Si hay negatividades, Dios es Transmutación.
Si hay opresión, Dios es Libertad.
Si hay corrupción, Dios es Justicia.
Si hay faltas, Dios es Perdón.
NOTA: Para ampliar el tema, leer el libro “Todo” del mismo autor.
Extracto del Libro “Pilares de la Metafísica”, de Rubén Cedeño.
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EMANACIÓN
Tú te desprendiste, hace millones de años, del “Gran, Gran, Gran Sol Espiritual Central”, Ishwara o “Dios Manifiesto”, como una “Chispa Divina”. Para concienciar esto, puedes afirmar muchas veces, concentrado en meditación: “YO SOY UNA CHISPA DIVINA EMANADA DEL “GRAN, GRAN, GRAN SOL ESPIRITUAL CENTRAL”.
“Tú no eres debilidad, ignorancia, odio, desarmonía, pobreza, desorden, mentiras, problemas, pecados, errores ni cosas negativas que han hecho creer o que crees de ti. En esencia, eres un “Ser Perfecto”.
Tu Verdadero “Ser Interno” es lo que se suele llamar el Espíritu, la Divina Presencia de Dios “YO SOY” o Átman, y como “Dios es Luz”, tú también eres Luz. La parte de nosotros que vivía participando de la “Conciencia Divina” es el “Ser Interno”. El “Ser Interno” en ti es la máxima expresión de vida, de existir, de “Ser”, y omo la acción personalizada de “Ser” en primera persona es “YO SOY”, el nombre verdadero del “Ser” es “YO SOY”. Eso nos permite decir: “EL PADRE Y YO SOMOS UNO”. Esta es una manifestación maravillosa. Cada vez que te sientas solo, desesperado y no halles que hacer, hazla. Y si somos dos, decretamos: “EL PADRE Y YO SOMOS UNO, Y CONTIGO SOMOS LA TOTALIDAD”. ESA AFIRMACIÓN TAMBIÉN PERMITE DECIR: “YO SOY UNO CONTIGO” a cualquier persona, porque una vez estuvimos juntos en el “Gran, Gran, Gran Sol Espiritual Central”, en la conciencia del Padre.
Extraído del libro “Metafísica Avanzada” de Rubén Cedeño
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La evolución y la mencionada espiritualidad en el ser humano no se cifra en sus creencias, la religión que practica, el grupo o la escuela a la que pertenece; tampoco en lo que cree o dice, sino en cuánto ha realizado, manifiesta e irradia de los "Siete Aspectos de la Totalidad de la Vida".
Los "Siete Aspectos de la Totalidad de la Vida" son los "Siete Aspectos de Dios". conocidos como los "Siete Expresiones de la Vida", los "Siete Rayos", los "Siete Dones del Espíritu Santo"o los "Siete Sabidurías".Hemos venido a la Tierra a desarrollar los "Siete Aspectos de la Totalidad de la Vida". Desenvolverlos es evolucionar; no tenerlos manifestados significa debilidad, ignorancia, desamor, retraso, falsedad, carencia o las "siete pobrezas".
La importancia del estudio, investigación, meditación, contemplación y realización de los "Siete Aspectos de la Totalidad de la Vida" radica en que es la única forma de desenvolver el "Ser Interno" y de fundirse con el "Ser Universal" o "Dios Manifiesto", y por último, con la "Absolutilidad" o Parabrahman, hecho que se conceptualiza como el Nirvana y que depende de la medida en que se comprendan y se realicen, en uno mismo, estas cualidades.
Estos Aspectos son los siguientes: Voluntad, Sabiduría, Amor, Armonía, Vida, Provisión y Libertad, y están manifestados en cada humano, en cada expresión de la Naturaleza y el Cosmos.
Las desgracias, los errores, las limitaciones, el andar mal en la vida son causados por el ir en contra de alguna de las "Siete Expresiones de la Vida".
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Mosaico de los Reyes Magos en San Apollinare Nuovo, Ravenna.
Los Reyes Magos fueron los Maestros Ascendidos El Morya, Koot Hoomi y El Tibetano, que vinieron a buscar a Jesús para conocerlo y adorarlo, con regalos que tienen un simbolismo y que le fueron de gran utilidad a la Sagrada Familia en la vida de Jesús. Ellos representaban los cuerpos físico, emocional y mental; también las razas reinantes en el mundo, que han ido inclinando el cetro de su poder y comando ante el nacimiento del Cristo. Eran inicialmente nueve, pero ante los horrores del desierto, algunos se devolvieron y no siguieron en la caravana que un fiero guía conducía. El cuarto Rey Mago, Artabán, tiene una historia fantástica que merece un capítulo aparte. La palabra "Mago", para la época, quería decir "astrólogo".
Las figuras de los Reyes Magos, con sus respectivos nombres, aparecen por primera vez en un esplendoroso mosaico estilo bizantino de la iglesia de San Apollinare Nuovo, en Ravenna, Italia, que data del año 520 después de Jesús.
MELCHOR venía de la India o Tíbet. Era el más joven de todos y llevaba incienso. Ahora es conocido como el Maestro Ascendido El Morya. Representa el Cuerpo Mental. EL INCIENSO de Melchor simboliza al Espíritu Santo; se puede usar pero se consume, se quema y se vuelve cenizas. Es la desaparición del pasado perturbador y triste. "El Fuego Sagrado Consumidor del Perdón consume y disuelve todos los errores cometidos por mí y pot toda la humanidad".
BALTASAR era de Etiopía, de mediana edad, y ahora es conocido como el Maestro Ascendido Koot Hoomi. En el mosaico de Ravenna, todos los Reyes Magos son de piel blanca. Fue en el siglo XVI cuando los pintores del Renacimiento pintaron de negro a Baltasar. Él representa el Cuerpo Emocional. La MIRRA de Baltazar
simboliza al Hijo o Cristo; es el aroma de la espiritualidad. Las personas espirituales tienen lo que se llama el "olor a santidad"; cuando los individuos son desagradables, huelen mal, como los pordioseros y borrachos. Por eso uno siempre debe oler bien. La Mirra simboliza el perfumar la vida para hacerla feliz, porque "el que vive en Cristo no sufre". La Mirra de Baltasar fue guardada por María para untar el cuerpo de Jesús después de la Crucifixión.
GASPAR era de Mesopotamia, al sur de Persia. Era el más viejo de los Tr
es Reyes Magos; llevaba oro y ahora se lo conoce como el Maestro Ascendido Djwal Khul. El ORO de Gaspar representa al Padre, o Dios, manifestándose como opulencia en la tierra. Simboliza el Cuerpo Físico. Para ser espiritual no hay que ser pobre. (...)
El Cristo en nuestro interior es la fuente de riqueza y provisión más grande que podamos tener; Él jamás desea que estemos carentes de algo. Afirma: "El Cristo en mí me provee de todo dinero y riqueza que necesite para vivir holgada y despreocupadamente". El Oro de Gaspar fue utilizado por la Sagrada Familia en el viaje a Egipto.
Extracto del libro "Espíritu de la Navidad" de Rubén Cedeño.
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PARABRAHMAN
(Segunda Parte)
Como es “Lo Absoluto”, en Parabrahman no hay conflictos, porque en Él se unen todos los pares de opuestos y no hay problemas ni escogencias. Basta realizar este estado de consciencia para salir de todo trance, incomodidad, desasosiego o sufrimiento. Al percibir, aunque sea un poco, “Lo Absoluto” o Parabrahman, se puede concienciar la imperturbabilidad, sin sufrimientos, sin problemas, permaneciendo en esta actitud: “YO VIVO IMPERTURBABLE EN LA CONSCIENCIA DE PARABRAHMAN, MÁS ALLÁ DEL BIEN Y DEL MAL”.
“Lo Absoluto” es lo primero que siempre ha existido, existe y existirá, indestructible, eterno, más allá de cualquier concepción. Todo lo que está por fuera de “Lo Absoluto” o Parabrahman, por “Principio de Polaridad”, es dual, y allí es donde surge el conflicto, la lucha, la escogencia de “esto sí, esto no” , “a ti te rechazo, contigo me quedo”. Porque todo viene por partida doble, ya que todo tiene su positivo y su negativo, o su masculino y su femenino, para poder expresarse. Esto está simbolizado por el símbolo del Yin y el Yang, que son dos gotas, una blanca y otra negra, persiguiéndose. La gota negra tiene un punto blanco, y la gota blanca, un punto negro, lo que simboliza que todo masculino tiene algo de femenino y viceversa.
En Parabrahman no existe ninguna polaridad del par de opuestos; por eso, anclado en Él, no hay conflicto.
Parabrahman inmanifiesto no tiene descripción; de Él no han salido los Siete Aspectos, los Siete Principios, los Cinco Dhyani Buddhas ni las Madres Divinas, porque no está manifestado. Por eso, de Parabrahman no se puede hablar “NADA”, y a todo lo que perturbe, se le puede decir: “¡TÚ ERES NADA! ¡DESAPARECE!” o, como los advaita en la India, “NETI”.
Extracto del libro "Metafísica Avanzada" de Rubén Cedeño
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La esencia de Dios es “Ser”, “Conciencia” y “Bienestar”. Dios es la “Totalidad de la Vida”; el “Gran Sol Espiritual Central”; la esencia de todo lo que “Existe”; Voluntad, Sabiduría y Amor en “Todo”; la “Energía”, tanto de lo llamado Divino como de lo material. No hay nada que no sea Dios.
Dios no es un concepto teológico, una creación mental de la religión, ni un ser antropomórfico que, desde una nube dirige caprichosa y arbitrariamente al mundo y a los humanos, viendo a quién premia o castiga. Dios no castiga a nadie.
El “Ser Supremo” puede recibir diversos nombres, según la religión o el idioma, como “Allãh”, “Jehová”, “God”, “Dieu” o “Brahman”, pero es el mismo Dios; lo que no es lo mismo es lo que la gente piensa de Él.
La “Totalidad de la Vida”, o Dios, es lo primero que se debe pensar, saber, amar, comprender, meditar, sentir, invocar y poner en práctica siempre. Este es el significado oculto de la primera frase de la Biblia, que dice: “En el Principio Dios…”. Todo “Estudio Interior” debe comenzar por Dios, porque realizarlo es su máxima finalidad.
Dios, como la “Totalidad de la Vida”, es lo primero metafísico que existe, ya que su esencia no se ve ni se toca, aunque hay pruebas de sus manifestaciones.
Dios es el “Concepto Inmaculado” de todas las cosas, el cumplimiento del “Plan Divino de Perfección”, el “Estado de Gracia” y Armonía, que es el Cielo, la Liberación. Los seres humanos hemos venido a la Tierra a disfrutar de todo esto. ¿Y por qué no se manifiesta? Por los pensamientos, sentimientos, decretos y acciones negativas; a causa de la mala voluntad, la ignorancia, el odio, la fealdad, la mentira, la enfermedad, la pobreza, la opresión y el rencor. Toda real “Enseñanza Interna” trata de eliminar la negatividad, porque esta es la que impide que se manifieste lo que es “Dios”.
El nivel de comprensión que se tiene de la “Totalidad de la Vida” o Dios influencia sobre todas las cosas que suceden en la vida. Cuando sabes correctamente quién es Dios y haces la práctica de “Su Presencia”, la totalidad de tus asuntos comienzan a marchar estupendamente. Desconocerlo y no saber aplicar “Sus Aspectos” es la causa de los problemas y sufrimientos.
Cada religión concibe a Dios de acuerdo con su estado de conciencia. La gente ha concebido a Dios según lo expresado por la tradición, los libros o los sacerdotes, sin reflexionar ni estar consciente, pero esto no es lo más favorable. Lo primero a saber y grabar en la mente y en los sentimientos, para toda la vida, se halla en el Génesis de la Biblia, donde se afirma: “Y vio Dios que el mundo era bueno”. Aplícalo en todo: “En Dios y en su creación no existe el mal”. Él no genera el mal ni daño alguno. El deseo de Dios siempre es “EL BIEN”, el cumplimiento del “Plan Divino de Perfección”, para que tú seas feliz. Cuando lo necesites, puedes afirmar: “Dios solo desea el máximo bien para mí”.
Extracto del Libro “Pilares de la Metafísica”, de Rubén Cedeño
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Es posible liberarse del sufrimiento, pero no se deja de sufrir por el uso de un talismán, un sortilegio, una brujería, una imagen, un cristal, ingerir un brebaje, pertenecer a una supuesta escuela espiritual, tener un Gurú, hacer determinados mantras, poseer dinero, cambiar de gobierno, mudarse de país; aunque puede que esto ayude, no hará desaparecer la raíz del dolor. EL sufrimiento es como el problema de matemáticas que le ponen a un niño en la escuela, que resolviéndolo obtiene un aprendizaje. Lo esencial es comprender el problema para poder solucionarlo. Si un problema de matemáticas no se resuelve con la observación, la inteligencia, aplicando las fórmulas, de nada sirve encenderle velas a una imagen, echarle incienso, ponerse a llorar, hacer mantras, rezos, o cambiarse de escuela espiritual. Observar y comprender la causa por la que está sufriendo, y cambiar la situación es lo que libera. Todo sufrimiento conduce a un aprendizaje, una sensibilización; por lo tanto, hay que ser sensible al aprendizaje que trae, para abrir la puerta a su solución.
Para "no sufrir más", se requiere de sensibilidad, estar despierto, tener una mente y un corazón cristalinos, incontaminados. El sufrimiento cesa con la iluminación, la clarificación, dándose cuenta de las cosas y sus causas, cultivando la sabiduría, y eso es lo más importante que se puede hacer en la vida.
Extraído del Libro IV No Sufras Más. Colección Obras Completas Vol. 6 Buddhadharma de Rubén Cedeño
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La "Mente Cristal" es la transparencia de mente, sentimientos, acciones y vida, capaz de hacer desaparecer todo conflicto, preocupación, oscuridad, mala comprensión. Un "Corazón de Cristal" es la representación de la pulcritud del amor sin límites, indiscriminado, transparente, sin egoísmos, que sana, bendice y jamás hace sufrir. La grandiosidad del logro de la "Clarificación" que desenvolvió el Señor Gautama no tiene explicación que pueda ser verbalizada por una mente humana. Solo podemos referirnos a ella por medio de símbolos e imágenes conocidas por la mente concreta.
Tener un "Corazón de Cristal", como el Señor Gautama, es poseer la transparencia de todos los sentimientos. Se puede desarrollar un "Corazón de Cristal"al tener sentimientos puros, sin manipulación, sin engaños, sin fantasías, dejando que se transparente, en el interior, todo dolor humano, sin rechazar ninguno; esto es "Compasión Infinita". Un "Corazón de Cristal" es completamente sensible y permeable. Para poder auxiliar el dolor de los demás, primero hay que dejarlo penetrar como si fuese propio. Esto es comprender el dolor, el abandono, la traición, la vida del sirviente, del borracho, del narcodependiente, del ciego, del paralítico o del gay discriminado.
Extraído del Libro Gautama, Libro I - Colección Obras Completas Vol. 6 Buddhadharma de Rubén Cedeño
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